- La mayoría de las personas necesitan hipotecarse para comprar una vivienda
- En los primeros años de la hipoteca se hace frente a los intereses más altos
A la hora de comprar una vivienda, la mayoría de las personas necesitan pedir una hipoteca y el periodo medio de duración de la misma ronda entre los 30 y 40 años. Durante este periodo, si la economía del hipotecado lo permite, es posible que se quiera amortizar de forma anticipada y sortear los intereses. En este contexto se plantea una cuestión, ¿interesa más reducir la cuota o el plazo del préstamo hipotecario?
Ante esta posición es necesario valorar la situación personal y cómo puede afectar al día a día la decisión tomada. En el caso de contar con una situación financiera holgada, desde Hipoo señalan que lo normal es que se prefiera reducir el plazo de la hipoteca, ya que se acabará pagando menos intereses al generarse durante menos tiempo, permitiendo ahorrar más a la larga. Sin embargo, en el caso de llegar más apurado a final de mes, desde el marketplace hipotecario apuntan que podría tener más sentido reducir la cuota a pagar con el objetivo de aliviar los pagos que se realizan de forma mensual.
Un aspecto a tener en cuenta en cualquiera de los dos casos «es que preferiblemente realices el proceso de amortización durante los primeros años de la hipoteca, ya que es en este intervalo de tiempo cuando se hacen frente a los intereses más altos», recuerdan desde la compañía. «En Hipoo negociamos con las entidades financieras la reducción de las comisiones legales de amortización y cancelación tratando de que nuestros clientes estén exentos de ellas», indica Juan Ferrer, CEO de Hipoo.
¿Hay comisión?
La comisión por amortización anticipada o por desistimiento se deriva de la cancelación u amortización total o parcial del préstamo antes del plazo pactado. En función de si la hipoteca es de tipo fijo o variable, el cancelarla en un plazo menor al establecido en el contrato conlleva el pago de una comisión, con unos máximos fijados por ley.
«Lo habitual es que exista una comisión de 0,15% únicamente durante los cinco primeros años de la hipoteca y el 0,25% solo durante los 3 primeros años del mismo. Una vez terminados estos plazos ya no se te puede aplicar ninguna otra comisión», explican desde Hipoo.
Desde la compañía recuerdan que, en el caso de aquellos que compraron una vivienda antes del 2013, existe la posibilidad de acogerse a una ventaja fiscal si se realiza una amortización anticipada: la deducción por adquisición y rehabilitación, la cual tiene un límite de 9.040 euros por declaración.
En cambio, si se trata de un matrimonio con separación de bienes, la base de reducción podrá llegar incluso al doble, 18.080 euros. Sin embargo, los intereses y las cuotas de amortización únicamente son deducibles solo por cantidades que se solventaron el ejercicio anterior, es decir, si se amortizó la hipoteca el año pasado se tiene que incluir la deducción en la declaración de este año.